Patmos, la remota isla griega que atrae a los visitantes, con pueblos soñolientos, refugios espirituales, playas de color turquesa y una naturaleza exuberante, es probablemente la próxima gran novedad del turismo de lujo. Pero el paradisíaco Dodecaneso ofrece algo más que placeres mundanos. Mencionada en el Libro del Apocalipsis de la Biblia, Patmos es frecuentada por aquellos que sienten que tienen que hacer un examen de conciencia. Entrelazada con todas las historias importantes de la humanidad, esta isla de ensueño fue el lugar donde el apóstol Juan escribió el texto apocalíptico del Libro Sagrado, tras ser exiliado por el emperador romano Tito Flavio Domiciano en el año 95 de nuestra era.
Hoy, Patmos forma parte de la peregrinación cristiana y cuenta con varios lugares de interés para la comunidad religiosa, como la Cueva del Apocalipsis, donde Juan recibió sus visiones de Jesús, y varios monasterios dedicados a su culto.
Según la mitología griega, la isla nació con la intervención divina de la diosa Artemisa. Y realmente, hay algo divino en este norte del Dodecaneso: desde las serenas y apacibles iglesias, el puerto repleto de yates y los restaurantes de alta sociedad, Patmos tiene algo que ofrecer para todo tipo de visitantes.
Elogiado por la revista Forbes como "el lugar más idílico de Europa para vivir", este impresionante destino griego ofrece una mezcla única de naturaleza, cultura e historia.
Los mejores lugares para visitar en Patmos
Chora
La capital de la isla es una ciudad de cuento llena de contrastes. Las tradicionales casas encaladas de estilo egeo chocan con las elegantes mansiones construidas durante el renacimiento; el impresionante Monasterio de San Juan el Teólogo, del siglo XI, alrededor del cual se construye el asentamiento, añade un carácter inconfundible. El laberinto de viejas calles empedradas alberga algunos de los cafés más modernos, con multitudes de moda, mientras que en la Cueva del Apocalipsis se asienta tranquilamente en la montaña, a medio camino del monasterio, y cuenta la historia del Armagedón. Venga a ver el lugar de descanso de Juan, donde utilizó una roca como almohada cuando escuchó la voz de Dios.
Los molinos de viento, dos de los cuales datan de 1588, son un lugar pintoresco desde el que disfrutará de encantadoras vistas de la ciudad, mientras que la Roca de Kalikatsou sirve para recordar que la naturaleza es el mayor artista de la Tierra, con un talento infinito para esculpir.
Todas estas curiosidades hacen de Chora un destino de la lista de deseos que deslumbra a personas de todo tipo. Junto con el monasterio, la cueva ha sido proclamada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, llena de mosaicos que representan la historia de la revelación. Si tiene algo de tiempo extra, visite el Museo del Folclore, situado en la antigua mansión que pertenece a una de las familias más influyentes. Verá exposiciones que cuentan la historia de las ricas tradiciones y costumbres de la isla, con artefactos que se remontan al siglo XIV d.C.
Aunque Chora (a veces llamada Hora) es una ciudad de infinita importancia histórica y religiosa, eso no significa que su día termine cuando los museos y monasterios cierran sus puertas. La plaza de Agia Levies cuenta con varios bares de lujo que sirven cócteles y ponen ritmos modernos hasta altas horas de la noche y que atraen a las élites acomodadas que vienen a soltarse la melena después de un día lleno de acontecimientos.
Skala
Skala, el mayor asentamiento y hogar de algunas de las puestas de sol más intrigantes, está construido alrededor de un pintoresco puerto, con casas encaladas salpicadas en una verde colina que brilla en la distancia. A sólo 5 km de Chora, esta elegante ciudad portuaria es un lugar perfecto para echar el ancla durante unos días en su crucero de lujo. Los buitres de la cultura querrán visitar la Iglesia de Agia Paraskevi de Cavo, del siglo XVII, desde la que disfrutará de vistas panorámicas de la ciudad, y el encalado Monasterio de Zoodochos Pigi, construido en los pinares de la ladera de una montaña, que tuvo una gran importancia en la historia moderna griega. Las antiguas ruinas de una acrópolis y la iglesia de Panagia Koumana, con su naturaleza verde y su cautivadora arquitectura, también podrían despertar su interés.
Un paseo por el paseo marítimo, repleto de yates, le hará tropezar con varias tiendas elegantes, que venden de todo, desde manjares gourmet hasta alta costura. Kapopoulos Fine Arts es una delicia para cualquier aficionado a la decoración de interiores, que encontrará su próxima oferta de arte o muebles en esta tienda conceptual digna de Vogue.
El icónico Arion Café-Bar, que lleva funcionando desde los años 70, se confunde a menudo con un tranquilo local de desayunos, pero en cuanto se pone el sol, se convierte en el bar nocturno más popular de Skala, con música soul y rock hasta bien entrada la noche. Tampoco está de más ir de bar en bar: diríjase a Fix o Ginger para tomar un cóctel finamente batido y observar a la gente. Póngase los zapatos de baile y que empiece la diversión.
Las mejores playas de Patmos
Donde lo antiguo se une a lo nuevo y lo ascético se une a lo lujoso, Patmos le dará muchas opciones a la hora de decidir dónde pasar el día. Si realmente fuera el fin del mundo, no nos importaría pasarlo aquí, especialmente en una de estas fabulosas playas.
Playa de Geranou
Aunque Juan el Evangelista habló de los días finales, la playa de Geranou cuenta la historia del principio, o más concretamente, del jardín del Edén. Las interminables extensiones de arena fina están bordeadas de naturaleza viridéntica, olivares y pinos. El mar es tan claro que se puede admirar el mundo submarino sin salir de su lujoso yate de alquiler y, sin embargo, nunca está abarrotado. Bien protegido de los vientos del Egeo, Livadi Geranou es bastante popular entre los navegantes que vienen a admirar la belleza seductora de esta joya escondida. En la cercana taberna encontrará bebidas y refrescos, mientras que en primavera, encontrará un raro prado de orquídeas lleno de coloridas flores.
Playa de Kambos
La playa más organizada de la isla, a sólo 9 kilómetros de la ciudad principal, Kambos es un lugar ideal para probar los juguetes acuáticos de su yate de alquiler, y el windsurf, la vela, el parapente y el piragüismo son actividades populares que se disfrutan aquí. La larga playa de guijarros tiene un mar completamente transparente y encontrará algo de sombra bajo los gruesos árboles que añaden un atractivo sereno a la impresionante playa de Patmos.
Playa de Skala
Quizás la playa más famosa de la isla, Skala ofrece un entorno seductor y grandes instalaciones turísticas. El agua es increíblemente limpia y brillante a pesar de lo cerca que está del puerto, cuyas vistas contribuyen a la gracia que tiene esta pequeña y encantadora playa. Una gran opción cuando su séquito quiere ir a la ciudad, mientras que usted siente que todavía anhela otro baño después de un día completo de crucero.
Playa de Petra
No se olvide de cargar completamente su cámara antes de venir, porque Petra no se parece a ninguna otra playa que haya visto hasta ahora. La playa, de color cetrino, tiene esculturas naturales de formas únicas, con el telón de fondo de un mar azul de intensos colores. Cerca, encontrará Plaki, una playa de arena popular entre los nudistas, tras la cual hay un bucle de calas y playas escondidas.
Playa de Meloi
Adorada por su encantador entorno, su exuberante naturaleza y su arena dorada, Meloi es un lugar ideal para divertirse con los más pequeños. Debido a su proximidad con Skala, se llena de gente en los meses de verano, pero algunas partes siguen ofreciendo un ambiente más tranquilo. Los aficionados a los yates también la visitan, ya que el amarre en aguas poco profundas permite un acceso sencillo a la embarcación, y el número de instalaciones hace que sea muy fácil pasar todo el día aquí.
Playa de Psili Ammos
Si tuviéramos que elegir una sola playa para visitar en Patmos, sería sin duda Psili Ammos. Aislada, privada y, en general, de ensueño, esta bahía escondida tiene todo lo que se puede desear de una playa exótica, incluidas las dunas que infunden misterio a este oasis. Los tamariscos dan sombra, y el mar es completamente transparente porque casi no hay gente que estropee la bahía. Podría confundirse fácilmente con una playa caribeña y tiene uno de los aspectos más deslumbrantes de todas las playas griegas.
